Tengo un devoraluz (tragaluz) en mi habitación. Y, aunque los primeros días lo odie porque las primeras luces del día inundaban el espacio y no me dejaban dormir (y yo que amo dormir) con la llegada de las lluvias comencé a adorar mi devoraluz...
escuchar la lluvia golpeando sobre él es maravilloso...
si ocurre de noche es aun mejor...
crea momentos ...
uff...
increíbles
Ahora no cambiaría a mi devoraluz por nada en el mundo...
ya me acostumbré a la luz invadiendo el espacio, de hecho, ya no me molesta y puedo seguir durmiendo hasta muy tarde...antes puteaba mil contra él, pero ya no, porque sé que cuando llueva me dará un regalo...
y en ese momento pondré a Beirut y me haré un té verde o con bergamota y disfrutaré del sonido...
y recordaré momentos
palabras
gestos
como con esta canción...
escuchar la lluvia golpeando sobre él es maravilloso...
si ocurre de noche es aun mejor...
crea momentos ...
uff...
increíbles
Ahora no cambiaría a mi devoraluz por nada en el mundo...
ya me acostumbré a la luz invadiendo el espacio, de hecho, ya no me molesta y puedo seguir durmiendo hasta muy tarde...antes puteaba mil contra él, pero ya no, porque sé que cuando llueva me dará un regalo...
y en ese momento pondré a Beirut y me haré un té verde o con bergamota y disfrutaré del sonido...
y recordaré momentos
palabras
gestos
como con esta canción...
No hay comentarios:
Publicar un comentario